¿CÓMO DEBEN SER LOS DIRECTORIOS ESTE 2024?

En columnas anteriores he resaltado distintos aspectos de la relación de los directorios con la sostenibilidad. Y no me cansaré de decir que es CLAVE tener el compromiso del gobierno corporativo de la empresa para avanzar en esta materia y ver los beneficios que trae. 

¿Pero qué características debe tener ese directorio? Hoy los desafíos regulatorios, económicos, tecnológicos, de sostenibilidad y otros, hacen que el rol de los directores y su relación con los equipos gerenciales de la empresa, sean una pieza fundamental para enfrentarlos de manera exitosa. 

En esta nota del Instituto de Directores de Chile, Agathe Porte y Claudio Muñoz, dos miembros de su propio directorio, plantean aspectos que me parecen importantes en esta conversación.  

En términos generales, destacan que el rol de los gobiernos corporativos está mejor entendido y también mejor ejecutado, permitiendo hacer un buen complemento con las gerencias de las empresas. Pero hay una brecha entre empresas de distintos tamaños, donde las más pequeñas son las que están más débiles.

LECCIONES 2023

Haciendo un balance, la nota destaca tres aprendizajes principales que dejó el 2023 en relación a los directorios: 

  1. Fortalecer los directorios en relación a ética y conflicto de interés. “No basta con tener códigos de ética en la empresa, debemos continuar fortaleciendo los procedimientos frente a situaciones específicas y el control en estos ámbitos”.

  2. Importancia de contar con directorios diversos. “Cuando el entorno es más complejo y el negocio se hace difícil, distintas miradas desde el directorio ayudan a enfrentar los desafíos y a aprovechar las oportunidades”.

  3. Incorporar a los colaboradores. “Es insuficiente tener un gobierno corporativo de clase mundial con sólidos procedimientos, políticas y controles si, en la práctica, los colaboradores no las conocen o no las aplican. Los directores tenemos que no solo mostrar el ejemplo, sino que ayudar a traspasar los valores de la empresa hacia adentro de la organización”.

DESAFÍOS 2024

Y también la nota plantea cuatro desafíos prioritarios para los directorios 2024:

  1. Saber avanzar en un entorno volátil y poco predecible. “El directorio debe aportar una mirada más amplia y reforzar la necesidad de transformación y adaptabilidad del negocio; debe ser real y efectiva la estrategia para enfrentar, por ejemplo, la Revolución Tecnológica Digital y el Cambio Climático, claros elementos sobre los cuales el directorio debe exigir respuestas concretas y estrategias bien definidas”. 

  2. Innovación y la adopción de nuevas tecnologías, en especial la IA. “Al ser una de las herramientas estratégicas con mayor potencial para la empresa, el directorio tiene por lo tanto un rol preponderante tanto en la definición de sus áreas de desarrollo, los recursos destinados, la gobernanza de uso, la reconversión de la fuerza laboral y la gestión de talentos. Nada urge más que eso”.

  3. Hacer real los factores ESG. “La mesa directiva debe no solo disponer de una estrategia concreta, debe compartirla y se debe involucrar de manera activa en su desarrollo y ejecución”. “El desafío que tiene la empresa es no solo cumplirlos sino que sacarles el mayor provecho para crear valor para el negocio”. 

  4. Minimizar el impacto de la contracción económica y de la revolución digital sobre el mercado laboral. “Como parte de nuestra responsabilidad social tendremos que tener un especial cuidado en reconvertir nuestra fuerza laboral, prepararla y capacitarla para el uso de las tecnologías y en particular de la IA de manera que los inconmensurables beneficios de esta tecnología se compartan más equitativamente”.

¿CÓMO DEBE SER UN DIRECTOR EN 2024?

Ser miembro de un directorio es más desafiante hoy que hace 10 ó 20 años atrás. El entorno cambiante, la irrupción de las tecnologías, las nuevas tendencias y exigencias del mercado requieren de directores mejor preparados en conocimientos y habilidades.

En la nota, los directores destacan algunas de las características que para ellos son relevantes:

  1. Abierto al aprendizaje. “Un buen ejemplo es la discusión sobre Inteligencia Artificial, no basta el concepto general, el director debe conocer sus fundamentos y los efectos que tal desarrollo tecnológico tendrá en su modelo de negocios”. 

  2. Jugador en equipo. “No sirven los individualismos, necesitamos más cooperación, más capacidad de discusión y acuerdo”. 

  3. Cuestionador y dispuesto a asumir riesgos calculados. “Como director, tenemos el deber intrínseco de agregar valor a la organización y, para ello, tenemos que saber desafiar el status quo”

  4. Capacitado. “Ser director no se improvisa y hay que actualizarse permanentemente porque lo que funcionaba ayer, ya no funciona y muchos conocimientos de antaño son obsoletos”.

A estas cuatro características, le agregaría EMPATÍA. No olvidemos que somos personas trabajando con personas, y cuando logramos entender qué es lo que moviliza al otro, sabremos responder mucho mejor a sus necesidades, podremos ser más asertivos al comunicar las decisiones, y abriremos la oportunidad a más colaboración y compromiso con los desafíos de la empresa.      

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